Casa Stadler

Dirección:
Pedro Nolasco Rojas N° 470
Categoria:
Casas Particulares
¿LA CASA DEL TELÉGRAFO?

Haciendo historia

   Estamos en la calle Pedro Nolasco Rojas, casi esquina Giagnacovo, y observamos dos numeraciones, 470 y 472, sobre la misma fachada. ¿A qué se deberá esto? ¿Cuál será su motivo? Según recuerda su actual morador, podría deberse a que en esta casa habría funcionado el antiguo telégrafo, a quien habría correspondido la numeración más alta. Habiendo investigado en oficinas municipales y apelado a la memoria de los montenses, no se han podido verificar ni descartar estos datos, por lo que, el interrogatorio permanecerá abierto.

   La propiedad perteneció a la familia Sánchez, constituida por Modesto Antonio, a quien vemos en la primera foto en su vejez, y su esposa Ramona Andrade. Ellos tuvieron ocho hijos: Belma, casada con Heberto Negri; César, casado con Irma Bolla; Ramona, apodada “Peta”, casada con Adam Stadler (a quien vemos en la siguiente foto); Élida, apodada “Coca”, casada con Carlos María Alzugaray; Dora Angélica, casada con Elisario Bendrame; José Raúl, apodado Josengo, casado con María Elvira Paillé; Nilda Graciana, casada con Pedro Antonio Ríos y Marcelo que falleció muy joven.

   En 1969 la familia determina la construcción de un salón con la finalidad de alquilarlo, ocupado actualmente por una peluquería, sobre el predio lateral frontal.

     El 21 de marzo de 1983, Adam y Ramona adquieren la propiedad de común acuerdo con los demás herederos, propiedad que hoy pertenece a sus dos hijos Adan Heberto y José Antonio. Aquí los vemos en su boda y, años más tarde, con sus hijos, Adán a la izquierda y José Antonio a la derecha.

Ramona “Peta” fue preceptora en la Escuela Media N°1, que en aquellos años se llamaba Escuela Nacional de Comercio, y que mostraba su ingreso a media cuadra sobre la calle Belgrano entre López y Rojas. Su esposo fue propietario rural y se dedicó a la administración del campo.

Stadler y el mar

  Tanto Antonio como Adan realizaron carreras vinculadas al mar. El primero en la Marina Mercante y el segundo a los 25 años ingresó en YPF, recomendado por un familiar. Comenzó trabajando en la cocina del barco, fue mozo y jefe de mozos en el comedor del mismo.

     Un dato curioso es que el 29 de enero de 1982, a bordo del buque tanque, de YPF “Puerto Rosales”, y, cumpliendo con las leyes sagradas del mar, Adan Stadler fue bautizado con el nombre de “Tonina” lo que le permitía navegar libremente en todos los dominios del Dios Neptuno, amo y señor de todos los océanos, mares, lagunas y lagunitas, quedando bajo su soberana protección.

Adan, en sus numerosos viajes, llegó a Alaska, Estados Unidos, Puerto Rico, Venezuela, México y el llamado Triángulo de las Bermudas, permaneciendo en esa enigmática zona durante varios días varados y viviendo incomprensibles situaciones.

     Durante la Guerra de Malvinas, en Ingeniero White, ascienden a la embarcación un teniente y dos cabos. La tripulación parte hacia el sur con la finalidad de abastecer combustible a los buques de guerra, entre ellos, al buque General Belgrano, que en su viaje resultara hundido por los bombarderos ingleses.

     Estuvo durante 40 días fondeado en la Isla de los Estados para no ser detectados. Una situación de supervivencia y daño psicológico ya que la embarcación debía estar a media luz porque los aviones enemigos hacían vuelos rasantes y en las pantallas del radar se detectaban submarinos ingleses. Más de siete buques argentinos fueron reabastecidos durante la guerra. Es loable el desempeño de los marinos argentinos que, aunque no participaron en las batallas, permitieron que las naves y nuestros soldados cumplieran su función.

  Luego de 15 años al servicio de la compañía estatal, el gobierno a cargo del presidente Carlos Menem decide privatizar Yacimientos Petrolíferos Fiscales, dejando desempleado a todo su personal.

     El 8 de febrero de 1983 el Comandante en Jefe de la Armada resuelve otorgar al buque de YPF “Puerto Rosales” la condecoración “Operaciones en Combate” por lo que se le confiere a Adan el uso de la medalla e insignia correspondientes.

   Y el 2 de abril de 1983 Adam recibe un Diploma de Honor y Botón Solapa en reconocimiento de los servicios prestados a la Patria, participando como repostero del buque Puerto Rosales, en las operaciones de Guerra del Atlántico Sur, en resguardo de la Soberanía Argentina de las islas Malvinas, Georgias y Sandwich del Sur.

  El 23 de septiembre de 2009, Adan también es reconocido por su servicio en la Guerra de Malvinas.

   El 10 de junio de 2012 ha sido nombrado Ciudadano Ilustre de Monte.

    Y en 2022, al conmemorarse 40 años de la gesta de Malvinas, YPF ha reconocido a todos aquellos empleados que participaron de este heroico hecho, con una medalla conmemorativa.

   Desde el 11 de marzo de 2011 Adan Heberto está casado con Marta Susana Suárez quienes habitan esta casa llena de recuerdos e historias para conocer y recordar.

La casa

  El solar que ocupa la casa tiene 16 metros de frente y 20 metros de fondo. En el patio aún puede verse el aljibe, con brocal de ladrillos revocados y trabajos en herrería, que usaba la familia.

   Fue una casa de habitaciones corridas interconectadas entre sí, a las que se accedía desde una galería, luego cerrada y convertida por sus dueños en el lugar de estar. El ingreso a la vivienda se daba por el zaguán con su puerta cancel o contrapuerta, que lo abría hacia la galería.

   Los típicos y coloridos pisos calcáreos de los ambientes de acceso y comunes, conviven con los de pinotea, sobre cámara de aire, a la usanza antigua, de los dormitorios. Ambos pisos, originales, al igual que las aberturas de madera de doble hoja con banderola superior.

  El frente con dos ventanas y una puerta de dos hojas remarcadas por molduras y relieves, y en lo alto una flor. La misma moldura con la flor se reitera al terminar la propiedad. Friso en la parte inferior. Sus dueños han puesto especial cuidado en no alterarla o modificarla.

Galería de fotos

  Las antiguas fotos que siguen denotan su edad tanto por su color, o ausencia del mismo, como por su contorno festoneado, y muestran a la familia en diversas ubicaciones. Así se observan a las damas en el frente de esta casona, festejos de carnaval en su patio interior, eventos familiares en su área de estar, zonas aledañas en donde se aprecia la imponencia de la Parroquia San Miguel Arcángel, al prescindir de todas las construcciones linderas que hoy conocemos, o el Club Náutico en 1942. Vehículos, vestimentas, costumbres que marcaron una gran época, postales que permanecerán grabadas y, así, preservadas, con su difusión.

Para Recordar

   Ante nuestros ojos tenemos una vivienda que se inserta en un tejido doméstico caracterizado por antiguas construcciones, las “casas chorizo”, y también de las nuevas, que luce orgullosa su materialidad y su forma de hacer originales, y que convive y contiene ricas historias de vida. Lo material y lo inmaterial, lo construido y lo intangible, indivisibles, aquí también en un todo.

   En Septiembre de 2022 se firmó el convenio de Preservación que declara a la ¿Casa del Telégrafo? (Casa Stadler) como Bien de Valor Patrimonial, según la ordenanza N 4362/20 y el decreto N°1688/22.

  • Adan Heberto Stadler
  • Susana Sánchez de Maureguy

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